En el cuidado de la salud, el autocuidado es cualquier función reguladora humana necesaria que está bajo el control individual, deliberado y autoiniciado. ¿Qué significa eso exactamente? Simplemente, ¿te tomas tiempo para ti? ¿Todos los días estás participando en algo que te hace feliz, agradecido, mejor ? No debe ser algo agotador o algo que no esperes, sino algo significativo. Si el ejercicio es una forma de cuidado personal para usted, no es necesario que se sienta “agotado” después. Pero si ir al gimnasio y concentrarse en su cuerpo y fuerza le da una sensación de logro y satisfacción, entonces, ¡sí! ¡Hazlo!
¿Puedes pensar en 3 cosas que te pongan una sonrisa en la cara y te den la sensación de estar vivo? Para algunos, es pasar tiempo con un nieto, ese sentimiento más estimulante de amar, jugar y contemplar esa dulce carita llena de asombro que les devuelve la mirada. Podría ser esa noche sumergirse en la bañera con una taza de té o una copa de vino que lo lleve de vuelta al centro. Largas caminatas, encender velas, abrazar a una mascota, darse un tiempo a solas para escribir un diario o incluso algo tan simple como una manicura o pedicura, cualquier cosa que lo haga sentir como un hombre o una mujer nuevos, eso es cuidado personal.
Otros ejemplos de autocuidado:
Cuando se cuida, comienza a sentirse mejor. Cuando te sientes mejor, se extiende a todos los aspectos de tu día: tu vida. Recuerde, se trata de renovar su mente, cuerpo y espíritu. Esa conexión y comportamiento intencional es clave. El buen ejercicio, la alimentación sana y los momentos de reflexión diaria nos hacen más intencionales y conscientes de quiénes somos como personas. ¿Le gusta en quién nos estamos convirtiendo como individuos? Eso no tiene precio. Mírate en el espejo. ¿Te quieres a ti mismo? Deberías, puedes. Cuídate.